Hay una serie de temas que son muy familiares a las personas que practican meditación budista: “La plena atención en la respiración” que trata de focalizar la atención en el ritmo de la respiración; “la meditación caminando”, que se centra en la sensación de los pasos al caminar arriba y abajo por un sendero, y la repetición interior de un mantra, como por ejemplo “Bu- do”. Todos estos métodos están pensados para ayudar a fijar la atención en la presencia de cada momento, en la realidad presente.
Junto a todos estos bien conocidos métodos de meditar, hay muchos otros que pueden servirnos para cumplir una función similar. Uno de ellos es conocido como la “escucha interior” o “meditación sobre el sonido interior”, Nada Yoga en sánscrito. Estos términos hacen referencia a lo que ha sido llamado “el sonido del silencio” o “el sonido Nada”. Nada es la palabra que en sánscrito se usa para “sonido”, y su significado en español es “nada”, una interesante y accidentalmente significativa coincidencia.